jueves, 24 de enero de 2008

Por fin, noticias desde Oriente Próximo

Hay que ver que rápido que se me pasa el tiempo cuando me acerco a estas tierras... Se diluye, se estira y se encoge y se vuelve a llenar de "inshallahs" a la hora de planear las cosas. De nuevo os escribo desde mi querida tierra (Santa), aumentando la cantidad de entradas a este blog enviadas desde este rinconcito del mundo. Qué le vamos a hacer, cada uno tiene sus debilidades, y la mía sin duda alguna está en este lugar.

El viaje fue de maravilla, madrugada en el aeropuerto poniendo cara de niños buenos que vienen a hacer turismo, no hubo preguntas, no hubo miradas inquisitorias, aunque aún así yo no podía evitar que el corazón me batiese a mil dentro del pecho mientras esperaba a que me sellasen la visa en el pasaporte.

Y Jerusalén, Palestina, hasta el momento muy bien para nosotros e igual de mal que siempre para los palestinos, si no peor. Para variar el muro ha aumentado su recorrido en mi ausencia, hasta el punto de que no fui capaz de encontrar el camino hacia la antigua casa de mis compañeros en Al-Ram (Jerusalén). Gaza vive uno de sus momentos más alarmantes, pese a la buena noticia de la apertura (forzada) de la frontera con Egipto, que al menos ha permitido que familias que llevaban dos años sin verse puedan volver a reunirse. Pero de nuevo hay importantes cortes en la electricidad, de nuevo hay soldados israelíes preparados en la frontera, de nuevo los supermercados se vacían de mercancías ante el pánico de la gente a quedarse sin alimentos. Gaza está al borde de sufrir una crisis humanitaria (de nuevo!!!!!!).

En Cisjordania todo sigue más o menos igual que siempre, mi Palestina me volvió a recibir con los brazos abiertos. A Jordi (mi acompañante, gracias al cual estoy viviendo en la estupenda casa del cámara de TV3, hay que ver lo bien que me relaciono últimamente) se le quedan los ojos como platos con cada checkpoint, con cada viaje por carreteras plagadas de asentamientos, ante los soldados que se pasean bien armados por el centro de Hebrón. Pero además, como buen historiador que es, también él me está descubriendo a mí la Palestina en la que hasta ahora no me había fijado demasiado. Al fin y al cabo no nos podemos olvidar de que en este país/países (elíjase la opción que se prefiera) las piedras y los olivos han visto pasar ante ellos miles de años de historia de la humanidad. De momento hemos apuntado en la lista de cosas hechas las ruinas de Masada y las callejuelas de las ciudades antiguas de Jerusalén, Belén y Hebrón, todo ello salpicado de un alarmante tono de espiritualidad imposible de evitar entre tanta iglesia, mezquita, incienso y canto de muecín cinco veces al día. Faltan Nablus, Haifa, el mar muerto y un viaje relámpago a Petra. Como veis no perdemos el tiempo.

Las fotos son de Hebrón, Jerusalén y Belén, cedidas por Jordi, que parece ser que aspira a ser también "buena persona" ;)

Busa ilkum

María

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Gaza vive uno de sus momentos más alarmantes, pero, se no atacas con terrorismo el Estadu de Israel, tudo se tornerse más facile.

Anónimo dijo...

El Islamismo representa el TERROR en el mundo.

Alicia dijo...

Como siempre, ¡Qué bueno leerte Marieta! Me quedan dudas, ¿visitastes a tus amigos y conocidos de Hebrón? ¿Qué tal el reencuentro?
Besos desde Finlandia!

Irenita dijo...

Maria, no se por qué está entrando gente desconocida al blog a poner comentarios, a qué se debe?
No es que me importe pero los comentarios..no son muy constructivos que digamos.
Me imagino que estar viviendo este viaje con Ràfols (es que Jordi no me sale) debe ser si cabe aun mas interesante por sus conocimientos de historiador. Auqnue él no se puede quejar de acompañante..vaya, que un duo dinámico muy complementario :)
Por cierto, te echo de menos, guapa!

Anónimo dijo...

Marhaba ya jamila. kifek? Inshallah tamam. Me alegro mucho que todo ha sido bien hasta el momento y espero que sigue asi.. siento si yo estoy alla contigo hablando de belen. Ya me contaras cuando vuelves. Mucha energia y muchos besitos, rowa